La décimo segunda generación del sedán más vendido de la historia, llega desde Brasil con cambios que van desde la estructura a la mecánica, pasando por el diseño, la tecnología, y el plus de ofrecer una versión híbrida. Con más de 45 millones de unidades vendidas en todo el mundo en 53 años de existencia, el Corolla se hace presente en una nueva generación que lo trae con muchos cambios partiendo desde la plataforma global GA-C basada en la filosofía de fabricación TNGA (Toyota New Global Architecture) que, entre otras cosas, otorga un centro de gravedad más bajo y por ende mejor predisposición dinámica.
La principal novedad en cuanto a propulsión es la llegada de la versión híbrida, la primera que se produce en la región (este modelo se fabrica en Indaiatuba, Brasil) y que combina un motor naftero 1.8 con uno eléctrico. La potencia combinada es de 122 caballos, y la encargada de dosificarla es una caja automática CVT con tres modos de manejo: Eco, Power y EV (100% eléctrico). En lo que respecta a la mecánica convencional también viene con noticias porque incorpora un nuevo motor naftero 2.0 de 170 CV (el anterior era 1.8 de 140 CV) asociado a una nueva caja CVT con levas al volante y que incluye un engranaje exclusivo para la primera marcha (de las 10 pre-seteadas), para que obtenga mejor empuje (mejora la salida) hasta el momento de corte y paso al esquema de variación continua.
Por fuera recibió retoques en la trompa, que luce tomas de aire más grandes y cambios en el paragolpes para quedar más llamativo y sofisticado. Tiene nuevas luces Led, flamante dibujo de llantas y ópticas traseras rediseñadas.
Por dentro también hay una renovación de la que se destacan el nuevo panel de instrumentos digital de 7″ y la pantalla táctil de 8 pulgadas con navegador, cámara de retroceso y compatibilidad con Apple Car Play y Android Auto. Si bien sigue siendo un sedán sobrio y discreto, con estos retoques queda bastante más moderno y en sintonía con lo que hoy existe en el mercado y que los clientes reclaman. En esta versión full SEG (luego se sumará el resto de las opciones) la butaca del conductor es eléctrica y por primera vez viene con techo solar.
En el rubro seguridad –al igual que RAV4- ofrece el Toyota Safety Sense, el paquete de asistentes al manejo compuesto por: sistema de pre colisión frontal, alerta por cambio involuntario de carril, luces automáticas y control de crucero adaptativo. Este dispositivo incorpora un radar de ondas milimétricas en el parabrisas, combinado con una cámara monocular colocada en la trompa para detectar una variedad de peligros y alertar al conductor. El esquema se completa con los controles de estabilidad y tracción, frenos ABS, ganchos Isofix y siete airbags.
Los precios de lanzamiento son: $1.912.500 para el naftero SEG CVT y 2.010.600 pesos para el SEG Hybrid eCVT. La garantía sigue siendo de 5 años o 150.000 kilómetros. Además, la compañía ofrece una garantía diferencial transferible de 8 años o 160.000 km sobre los componentes híbridos: baterías hibridas, Convertidor – inversor, unidad electrónica de control.
