La marca festejó ayer un aniversario más desde el desarrollo de aquel icónico modelo en nuestro país.
Un 20 de septiembre de 1963 salía de la línea de producción la primera unidad de la pick up de Jeep. Un vehículo que se comenzó a comercializar en 1964 y que finalizó en 1978 con más de 27 mil unidades producidas. Hoy, el modelo viene importado desde Estados Unidos.
Gladiator estaba impulsado por el motor Continental 6L-226 de 3.707 cc y 115 Hp, asociado a una caja manual de tres relaciones, con segunda y tercera marcha sincronizadas. Se ofrecía en capacidades 500 kilos y 1.000 kilos de capacidad. Contaba con llantas de 16″, reloj eléctrico, radio, encendedor de cigarrillos, y espejo exterior regulable. El frontal respetaba la esencia de Jeep con una parrilla de barras verticales que incluían el logo sobre el borde inferior izquierdo.
A partir de 1965, se equipó con un motor Tornado Super Power, de 3.770 cc y 130 hp a 4.200 rpm. Dos años después presentó un restyling en la parte frontal con una parrilla más ancha y la incorporación del motor Ambassador 380 de 145 hp, acoplado a una caja de cuatro marchas. Además modificó su denominación a T80.
En 1970 se completó la oferta con la llegada de la nueva versión 1000 diésel, impulsada por un motor Perkins de 3 litros de cilindrada y una potencia de 71 hp.
En total se hicieron 27.811 unidades en la planta de Santa Isabel en Córdoba. Como mencionamos anteriormente, la producción terminó en 1978 y el nuevo Gladiator apareció para el año 2019 con la antigua denominación y en versiones Overland y Rubicon para el 2021.